El vicepresidente de El Salvador, Félix Ulloa, dijo a periodistas que la “guerra contra las pandillas“, que catalogó como una operación, es “correcta” y aseguró que en “una guerra siempre habrá víctimas”.
La llamada “guerra contra las pandillas” se enmarca en un régimen de excepción implementado desde finales de marzo tras una ola de asesinatos, la más alta en el Gobierno de Nayib Bukele, y el Congreso autorizó la entrega de recompensas por las denuncias que lleven a la detención de supuestos pandilleros.
“Cuando se tiene una operación con un 95 % de éxito, sin duda la operación es correcta. Siempre en una guerra habrá víctimas inocentes, habrá daños colaterales, hay que corregir, no se justifica”, manifestó Ulloa a un periodista local tras ser cuestionado sobre las miles de denuncias de detenciones arbitrarias, violaciones a derechos humanos y de fallecidos dentro de las cárceles.
Sobre las denuncias de detenciones arbitrarias, el vicepresidente señaló: “Si haces un examen de proporcionalidad y ves la dimensión de esta operación y son más de 45.000 las personas detenidas y la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos informa que hay 2.673 denuncias, estas viendo que no es ni siquiera el 5 %”.
Las denuncias de violaciones a derechos humanos en más de 100 días de estado de excepción superan las 3.000 y son más de 50 personas, según registros de organizaciones humanitarias y de medios locales, las que han fallecido bajo custodia estatal.