Los católicos de la ciudad nicaragüense de Masaya celebraron a San Miguel Arcángel sin sacarlo en procesión a las calles debido a una prohibición policial.
Decenas de católicos de Masaya celebraron la “bajada” de San Miguel de Arcángel, ante la presencia de agentes policiales que acudieron al templo para asegurarse de que los feligreses no sacaran una réplica del santo a las calles.
La Policía Nacional prohibió las procesiones en honor a San Jerónimo, patrono de la ciudad de Masaya, y a San Miguel Arcángel, alegando razones de seguridad pública, informó el sábado pasado la Arquidiócesis de Managua.
Durante la eucaristía de este lunes, el jefe de la Policía departamental de Masaya, Juan Valle, acompañado de agentes, ingresó a la iglesia San Miguel Arcángel y conversó con el presbítero Ramón López, a cargo de la parroquia, para recordarle que no podían salir con el santo a las calles.
En las afueras de esa parroquia estaban apostados decenas de agentes antidisturbios, a bordo de seis patrullas.