El candidato presidencial colombiano Gustavo Petro, de la coalición de izquierdas Pacto Histórico, reanudó en Cúcuta, en la frontera con Venezuela, su campaña en plaza pública tras una interrupción de tres días por un supuesto plan para atentar contra su vida.
Petro tenía programadas varias actividades en Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, pero debido a un cambio de agenda solo llegó a la ciudad para encabezar una concentración en el sector de Natilán, de la ciudadela Juan Atalaya, una de las barriadas cucuteñas.
Con un notable refuerzo de su seguridad, que incluyó guardaespaldas con escudos que subieron con él a la tarima y un chaleco blindado que se le notaba por debajo de la camiseta de colores rojo y negro del club de fútbol Cúcuta Deportivo, Petro se dirigió a la multitud de simpatizantes que lo esperaban desde temprano, sin importarles el calor de esta región de Colombia.
Según el equipo de seguridad de su campaña, detrás del intento de atentado denunciado el lunes estaría la banda criminal La Cordillera, que opera en la región cafetera del centro del país, versión que fue tomada inicialmente con cautela por las autoridades que luego acordaron con el candidato un refuerzo de su seguridad.