Se reporta que gracias a la persecución realizada por el gobierno de Daniel Ortega se esta dando una huida de clérigos católicos del país. Uno de ellos es Uriel Vallejos, párroco de la ciudad de Sébaco, quien ha huido a Italia luego de ser asediado por la policía durante tres días a principios de agosto.
Vallejos logró burlar la vigilancia de las autoridades que resguardaban la iglesia Divina Misericordia, en el norteño municipio de Sébaco. Su primer paradero fue Costa Rica, desde donde ha viajado hasta Italia para poder refugiarse.
Al menos seis sacerdotes habrían cruzado la frontera sur de Nicaragua rumbo a Costa Rica en el último mes. Cada uno de ellos esta huyendo de la represión que ha desatado el gobierno de Daniel Ortega contra la Iglesia Católica. No obstante, la cifra podría ser mayor, ya que muchos prefieren pasar desapercibidos.
El caso del obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez, ha sido bisagra para comenzar con distintos operativos policiales contra los clérigos. Álvarez permanece detenido desde hace 20 días esperando por un proceso judicial. Con él, otros 8 religiosos fue llevados a la cárcel policial de El Chipote, un reconocido centro de tortura.
El éxodo de los sacerdotes no ha sido oficializado por la jerarquía católica nicaragüense. De hecho, el cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua, ha criticado a la prensa por publicar información “sin corroborar” sobre el exilio de varios sacerdotes.