El régimen de Daniel Ortega cerró la oficina de la Organización de Estados Americanos en Managua. Además, adelantó la salida de los representantes de Nicaragua ante ese organismo, de la cual ya había anunciado su retiro en noviembre del año pasado.
Según el ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, Denis Moncada, su país dejó de participar de inmediato en la OEA y retiró los poderes de sus representantes en Washington. “Entonces esta nefasta agencia tampoco tendrá oficina en nuestro país. Su sede local ha sido cerrada”, agregó.
En una carta leída a través de una transmisión oficial, Moncada dijo que “a partir de esta fecha” Nicaragua deja de formar parte “de todos los engañosos mecanismos de este engendro, llámense Consejo Permanente, llámense comisiones, llámense reuniones, llámense Cumbre de las Américas”.
“No tendremos presencia en ninguna de las instancias de ese diabólico instrumento de la mal llamada OEA”, sentenció.