La Asociación de Familiares de Presos Políticos (AFPP) advirtió recientemente que en Nicaragua hay al menos 21 opositores detenidos mayores de 60 años que están viviendo una “crisis humanitaria”, debido a su edad y condiciones de salud.
El antiguo sacerdote diocesano defensor de la teología de la liberación Edgard Parrales, de 79 años, y el exembajador de Nicaragua en Costa Rica Mauricio Díaz, de 71, ambos acusados de “traición a la patria”, pasarán de prisión preventiva a detención domiciliaria con custodia policial, informó el Ministerio Público.
Con Parrales y Díaz suman cinco los líderes opositores o críticos al Gobierno de Daniel Ortega a quienes la Justicia, a petición de la Fiscalía, ha decidido enviar a sus casas tras la muerte del histórico combatiente sandinista Hugo Torres, también acusado por “traición a la patria”.
“El Ministerio Público, ante el estado de salud de las personas referidas, por razones humanitarias, pidió a la autoridad judicial el cambio de medida cautelar de prisión preventiva por detención domiciliaria, lo que fue autorizado por la correspondiente autoridad judicial”, explicó la Fiscalía en una declaración.