El gobierno ecuatoriano solicitó la supervisión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en la investigación del asesinato. La joven abogada María Belén Bernal Otavalo falleció al interior de la Escuela Superior de Policía en Quito cuando fue a visitar a su esposo, quien está prófugo.
La Secretaría de Derechos Humanos solicitó el apoyo del organismo internacional para garantizar la imparcialidad de la investigación del crimen. Esta semana el cuerpo de Bernal fue hallado en una ladera cercana sede de la academia policial. Hasta ahora, Germán Cáceres, esposo de la víctima es el principal sospechoso.
El gobierno de Ecuador quiere que la investigación se imparcial, respetuosa de los derechos humanos y con enfoque de género. Además, han pedido que se adopten mecanismos de seguimiento que garanticen investigaciones independiente, rápidas y eficaces.
La preocupación de la secretaría radica en las dudas sobre los procedimientos que se realizaron a partir de la desaparición de Bernal el 11 de setiembre. El comandante general Fausto Salinas confirmó que la mujer falleció en la habitación de su esposo en el cuarto piso del bloque de dormitorios masculinos.
La madre de María Belén, Elizabeth Otavalo, denunció que se trata de un “crimen de Estado” luego de un velorio organizado en la Universidad Central del Ecuador. Asimismo, la madre afirmó que llevaran el caso hasta instancias internacionales.
Por el momento el director de la Escuela Superior de Policía fue despedido. Así también, el Gobierno ha ofrecido una recompensa de $20.000 por cualquier información que lleve a la captura de Cáceres. Por último, han activado la alerta internacional en caso el sospechoso haya huido del país.