A grito de “Libertad, Libertad” los cubanos bloquearon algunas calles y municipios de la capital para exigir que sea restituido el servicio de Internet y de energía eléctrica.
El caos que dejó en Cuba el huracán Ian y el colapso del sistema eléctrico, sumado a los problemas en el suministro de agua y las telecomunicaciones, multiplicó el descontento tras años de crisis económica en la isla. Desde el último viernes a la noche, vecinos de diferentes barrios de La Habana comenzaron a salir a las calles para protestar por los continuos cortes eléctricos que ya superan las 72 horas continuas en varias localidades de la isla. Sumado a la falta de luz, la dictadura de Miguel Díaz Canel aumentó la censura y restringió el acceso a Internet para evitar que las protestas se difundan.
Desde ayer no hay internet en la isla. El corte se produjo de noche, cuando las protestas se volvieron espontáneas en todo el país, pero, principalmente, en La Habana, ya se habían viralizado. Acorralado, el dictador Miguel Díaz Canel siguió el manual autoritario y restringió el acceso a la red para evitar que las protestas se difundieran. La iniciativa de monitoreo Netblocks reportó que después de las 20:00 los datos de la red en tiempo real mostraron que la conexión a Internet sufrió un corte abrupto en la isla.
A grito de “Libertad, Libertad” los cubanos bloquearon algunas calles y municipios de La Habana para exigir que sea restituido el servicio de Internet y de energía eléctrica e hicieron retroceder a la policía política del régimen. Las protestas habían iniciado en La Palma y en Calzada de Bejucal, en el municipio de Arroyo Naranjo, y luego se sumó Puentes Grandes, en Playa, donde no tienen luz desde hace 72 horas, informó el diario 14 y 1/2
Varios videos que circulan en las redes sociales muestran una multitud en Arroyo Naranjo con cacerolas y exigiendo a gritos que el régimen resuelva la crisis energética que enfrenta el país. “Bloquearon la calle para que no pasen”, dice una mujer que graba la protesta. “¡Abajo la dictadura, basta ya!”, grita, mientras se une a los manifestantes. Junto a la multitud hay varios policías sin atreverse a intervenir, describió el citado medio independiente.