En su primer discurso como mandatario en un balcón del palacio presidencial La Moneda, el exlíder estudiantil hizo así una clara referencia a los regímenes de Cuba, Venezuela y Nicaragua, a los que ha criticado en diversas ocasiones desde que inicio la carrera presidencial.
El nuevo presidente de Chile, Gabriel Boric, dijo que su Gobierno promoverá “siempre” y “en todo lugar” el respeto a los derechos humanos “sin importar el color del gobierno que los vulnere”.
Boric, que con 36 años es el gobernante más joven de la historia chilena, pidió también a sus pares latinoamericanos promover la integración regional y prometió que desde Chile se harán “esfuerzos para que la voz del sur se vuelva a escuchar firme en un mundo cambiante”.
“Practicaremos la autonomía política en el ámbito internacional sin subordinarnos a ninguna potencia”, aseguró ante miles de simpatizantes, que en algún momento durante el discurso le interrumpieron al grito de “¡Boric, amigo, el pueblo está contigo!”.
Bregado en las luchas estudiantiles y crítico del modelo neoliberal instalado durante la dictadura militar, Boric dijo que es necesario “redistribuir” la riqueza en Chile, uno de los países más desiguales de la región y donde miles de personas salieron en masa a manifestarse en 2019 a favor de un modelo más justo.