El expresidente de Brasil dio sus declaraciones el jueves por la noche a la cadena Globo como parte de su campaña electoral. Lula Da Silva reconoció que durante su gobierno no puede negar que hubo corrupción, no obstante, trató de desvincularse al caso Lava Jato.
Da Silva aprovechó para afirmar que en los últimos 5 años ha sido “masacrado”. “Si alguien se equivoca, alguien comete un delito, se investiga, se juzga, se condena o se absuelve y el problema está resuelto”, aseguró el candidato presidencial.
El ex mandatario pasó un año en la cárcel por motivo del mediático caso de corrupción conocido como Lava Jato. En ese año que estuvo en prisión, su defensa demostró una mala praxis por parte de la justicia. Da Silva aseguró que el objetivo político de la investigación era condenarlo.
En ese sentido, Lula Da Silva afirma que su candidatura llega para “pacificar” el país, el cual se ha visto rodeado por una polarización política. El candidato del Partido de los trabajadores (PT) hizo alusión a los comentarios del presidente Jair Bolsonaro, a quien acusa de de “incitar al odio”.
“Feliz era Brasil y la democracia brasileña cuando la polarización en este país era entre el PT y el PSDB. Éramos opositores políticos, intercambiábamos pujas, pero nos reuníamos (…) no nos trataron como un enemigo, nos trataron como un adversario”, recordó Lula.