Por ahora las normas en Inglaterra abogan por el uso de mascarillas en ciertos lugares cerrados y en el transporte público, la recomendación de trabajar desde casa y el empleo de certificados covid para demostrar el estatus de vacunación.
El primer ministro británico, Boris Johnson, podría afrontar una rebelión masiva dentro de su propio partido si no pone fin en Inglaterra a todas las restricciones del Covid-19 para el próximo día 26, según advirtió el influyente diputado tory Mark Harper al diario Financial Times (FT).
El parlamentario conservador, presidente del llamado Grupo Tory de Recuperación de la covid, muy escéptico con los confinamientos, considera que el jefe del Ejecutivo debe terminar con todas las normas restrictivas y no volver a aplicarlas.
Si Johnson optara por extenderlas a finales de este mes, Harper anticipó que el “premier” se arriesga a comprometer su liderazgo.
Harper opinó que “habrá aún más personas contrarias” a las restricciones para contener la pandemia y dijo que “el argumento intelectual (para justificar la introducción de las medidas) es ahora todavía más débil”.