La famosa había recibido 250.000 dólares y no lo reveló, como obliga la ley, lo que le ha generado una sanción económica.
Kim Kardashian mostró en junio de 2021 a sus 225 millones de seguidores de Instagram de entonces las supuestas bondades de una criptomoneda como si fuera un consejo de amigos. En realidad, había cobrado 250.000 dólares por su mensaje. Al final, le ha salido caro. La Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos (la SEC, por sus siglas en inglés) ha anunciado este lunes una multa de 1,3 millones a la celebridad por promocionar el criptoactivo ofrecido por EthereumMax sin revelar el pago que recibió. Además, la empresaria se compromete a no hacer publicidad de criptomonedas en tres años.
La ley estadounidense obliga a revelar la naturaleza, la fuente y la cantidad recibida por promover la inversión en valores, incluidos los criptoactivos. Kardashian ha llegado a un acuerdo para liquidar los cargos por el que acuerda restituir lo cobrado con intereses más una multa de un millón de dólares. En total, 1,26 millones de dólares (1,29 millones de euros al cambio actual).
La celebridad y empresaria afirmaba en un vídeo subido a Instagram el 13 de junio de 2021 que tenía un “gran anuncio” que hacer. A continuación, un mensaje suyo decía: “Eh, chicos, ¿¿¿¿estáis en las cripto???? Esto no es consejo financiero, sino compartir lo que mis amigos me han contado de los token de EthereumMax”. Y continuaba con promoción de una oferta de criptoactivos. El post de Kardashian contenía un enlace al sitio web de EthereumMax, que daba instrucciones para que los potenciales inversores compraran tokens EMAX, según la resolución de la SEC, sin revelar en ningún momento que se trataba de publicidad.
“Este caso es un recordatorio de que, cuando las celebridades o las personas influyentes respaldan las oportunidades de inversión, incluidos los valores de criptoactivos, no significa que esos productos de inversión sean adecuados para todos los inversores”, ha dicho el presidente de la SEC, Gary Gensler, en un comunicado. “Animamos a los inversores a considerar los riesgos y oportunidades potenciales de una inversión a la luz de sus propios objetivos financieros”.
“El caso de la señora Kardashian también sirve para recordar a las celebridades y a otras personas que la ley les obliga a revelar al público cuándo y cuánto se les paga para promover la inversión en valores”, ha añadido Gensle, que ha publicado hoy un vídeo en el que advierte a los inversores de que no deben tomar decisiones basadas únicamente en las recomendaciones de una celebridad o persona influyente, aunque seguramente no va a tener tanta audiencia como el de Kardashian.