Los Rams festejaron el miércoles su primer anillo de campeones en Los Angeles. Tras haber ganado en enero del 2000 en San Luis, se coronaron en casa ante los Bengals y lo festejaron en el estadio que les acogió los primeros tres años del regreso a California, el Memorial Coliseum.
Aaron Donald, Matthew Stafford y Cooper Kupp recibieron las llaves de la ciudad de Los Angeles, de manos del alcalde Eric Garcetti, quien además declaró el 16 de febrero como el Día de los Rams.
En cuanto a cifras de personas en la ruta del desfile, no estuvo a la par de festejos como los de Chiefs o Buccaneers, pero la comedia estuvo presente, aunque al parecer nadie tuvo una borrachera nivel Tom Brady.
Aaron Donald quizá lo intentó más que nadie. Famoso por su musculatura, la camisa salió volando desde temprano.
Hubo lluvia de bebidas por todos lados, incluyendo los tradicionales lanzamientos de latas de cerveza de los aficionados al camión, con los jugadores vaciándola de un trago.
Lejos de la ruta del desfile, también hubo reconocimiento al equipo campeón. El famoso letrero de Hollywood cambió por un día, pasando a leer RAMS HOUSE, el grito de la afición en el SoFi Stadium.