La erupción, la primera que se registra en esta isla en 50 años, forzó a casi 5.000 vecinos a dejar sus casas, desde que comenzó en la tarde del domingo.
La lava del volcán Cumbre Vieja que entró en erupción en la isla española de La Palma, en el turístico archipiélago de Canarias, continuaba el lunes su lento descenso hacia la costa destruyendo a su paso numerosas unas 100 viviendas y obligando a evacuar a miles de personas.
El gobierno regional de Canarias precisó, sin embargo, que no preveía por ahora nuevas salidas, ya que las coladas de lava se dirigen ahora “hacia el mar”, según indicó en Twitter.
Pero los daños provocados por la erupción son ya visibles.
“Las casas destruidas (…) son muy numerosas”, indicó una portavoz del gobierno regional de Canarias, precisando que “no hay cifra fija todavía”.
Los impresionantes ríos de lava arrasaron árboles, invadieron carreteras y lograron penetrar en algunas casas, tal y como muestran varios videos publicados en las redes sociales.