Bulgaria vuelve a tener elecciones por segunda vez en tres meses este fin de semana, después que los comicios de abril no dieran un claro ganador en el parlamento.
El partido GERB del exprimer ministro Boyko Borissov fue el que salió mejor, pero obtuvo apenas el 26% de los votos. El descontento popular disminuyó su respaldo con respecto a cuatro años antes, cuando obtuvo el 33% de los sufragios.
Las encuestas más recientes indican que el apoyo al GERB ha caído aún más desde que el gobierno abrió una investigación de corrupción en torno al período en que Borissov fue primer ministro.
Los sondeos apuntan a un empate técnico entre el partido de Borissov y su principal contrincante, el populista Existe Un Pueblo Como Ese, liderado por la personalidad de televisión Slavi Trifonov.
“Hay dos claras tendencias en los últimos dos meses: una merma en el apoyo hacia el GERB, principalmente debido a las medidas del gobierno interino, y un crecimiento leve pero claro de Existe Un Pueblo Como Ese”, expresó Dimitar Ganev, analista político que trabaja para la firma de investigaciones búlgara Trend.