Una mujer británica testificó que Ghislaine Maxwell la presionó para que diera masajes sexuales a Jeffrey Epstein cuando aún era una adolescente, asegurándole que se divertiría con él, además, señaló que él necesitaba tener relaciones sexuales “tres veces al día”.
Durante la segunda semana del juicio federal contra Maxwell, “Kate”, un seudónimo para proteger su privacidad y la de su hijo, señaló que le presentaron a Maxwell en París en 1994 cuando tenía 17 años. Unas semanas más tarde, Maxwell la invitó a tomar el té en su casa de Londres y le habló de su novio “filántropo” Epstein.
Luego, Maxwell invitó a Kate a la casa del pueblo de nuevo para conocer a Epstein, empujándola a aceptar la invitación con un sentido de “urgencia”, recordó. En el lugar, le pidió que le “diera un masajito en los pies” y en los hombros.
A las semanas, la invitaron a que diera un masaje a Epstein, quien se desnudó en una camilla de masajes en una habitación en penumbra en la casa de la acusada, quien abandonó la habitación y cerró la puerta.
El masaje terminó en una relación sexual, al término de la cual Maxwell le dijo: “Te divertiste, eres una buena chica, estoy tan feliz de que pudieras venir”, testificó Kate.
La semana pasada, otra testigo se presentó con el seudónimo de “Jane” y declaró que tenía 14 añoscuando Epstein empezó a abusar de ella y que Maxwell a veces estaba presente e incluso participaba.
Maxwell se enfrenta a una condena perpetua si el jurado la encuentra culpable.