Los pilotos resultaron ilesos tras realizar aterrizajes de emergencia. La colisión se produjo entre un bimotor Fairchild Metroliner y un monomotor Cirrus SR22.
El piloto de un avión que colisionó con otro en pleno vuelo cerca de Denver solicitó un aterrizaje de emergencia por un fallo del motor, sin saber que su avión estaba casi partido por la mitad, según el audio del control aéreo. Milagrosamente, ambos aviones aterrizaron y nadie resultó herido.
Los aviones se disponían a aterrizar en un pequeño aeropuerto regional de un suburbio de Denver el miércoles cuando colisionaron, según la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés) y South Metro Fire Rescue.
El piloto que solicitó el aterrizaje de emergencia era la única persona a bordo de un bimotor Fairchild Metroliner que aterrizó en el aeropuerto Centennial a pesar de los importantes daños sufridos en su sección de cola. El avión es propiedad de una empresa con sede en Colorado, Key Lime Air, que opera aviones de carga.