El secretario de Estados Unidos, Antony Blinken, comenzó el miércoles su primera visita oficial a África en Kenia con una llamada a preservar la democracia y la inclusión en sociedades con divisiones étnicas y políticas, en medio de una crisis en aumento en las vecinas Etiopía y Sudán.
Durante la reunión privada con el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, y otros altos funcionarios, Blinken elogió la labor de Kenia en la búsqueda de aliviar el conflicto en Etiopía, así como su democracia dinámica e inclusiva pese a los desafíos en elecciones recientes.
Según el Departamento de Estado, la reunión a solas entre Blinken y Kenyatta se prolongó hora y media.
“Seguimos viendo que se cometen atrocidades, personas que sufren e independientemente de cómo lo llamemos, debe detenerse y debe haber responsabilidad”, dijo Blinken más tarde a los periodistas, y agregó que tomará una determinación sobre si la situación es un genocidio.
Antes, en un encuentro con líderes civiles, Blinken habló sobre la importancia de combatir la “recesión democrática” en todo el mundo, incluidos desafíos en Estados Unidos que demuestran “lo frágil que puede ser nuestra democracia”.
Blinken intenta impulsar los hasta ahora infructuosos intentos diplomáticos de Estados Unidos por resolver los conflictos en Etiopía y Sudán y responder a insurgencias que crecen en otros lugares, como Somalia.
Su viaje a Kenia, Nigeria y Senegal esta semana llega tras meses de intentos del gobierno de Joe Biden de controlar las dos crisis.