El martes, Estados Unidos alcanzó una media de siete días de 265.427 nuevos casos diarios de COVID-19, según datos de la Universidad Johns Hopkins. Este registro se da mientras algunos hospitales de niños vuelven a registrar un aumento en los ingresos, una alarma sobre la exposición de los más pequeños.
Asimismo, esta cifra significa la superación del anterior récord registrado el 11 de enero, que era de unos 251.989 casos diarios. Ello se ha visto reflejado en las salas de pediatría. Alrededor de 305 niños en promedio lucharon contra el COVID-19 en un hospital en un día cualquiera durante la semana que terminó el 26 de diciembre, según los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. (HHS).
La aleccionadora cifra supone un aumento de más del 48% con respecto a la semana anterior y un 10,7% menos que la media máxima de 342 niños que ingresaron en hospitales con el virus a finales de agosto y principios de septiembre.
Y aunque todas las personas de 5 años o más en EE.UU. son elegibles para recibir una vacuna, alrededor del 40% de la población total no está completamente vacunada, lo que los pone en mayor riesgo de sufrir los resultados más graves de covid-19, incluyendo enfermedades graves y la muerte.