“Lo sé, estoy seguro, el presidente Trump no tenía la intención de atacar a los chinos”, dijo en una audiencia ante al Comité de las Fuerzas Armadas del Senado.
El jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, general Mark Milley, aseguró el martes que las llamadas a sus homólogos chinos al final del mandato de Donald Trump buscaban “disminuir” la tensión con Beijing y que el exmandatario estadounidense nunca quiso atacar a China.
“Mi tarea en ese momento era desescalar. Mi mensaje fue coherente: mantener la calma y la estabilidad y desescalar. No vamos a atacarlos”, señaló Milley.
Las llamadas entre Milley y su par chino, el general Li Zuocheng, fueron reveladas por primera vez en el libro “Peril” (Peligro), de los periodistas del Washington Post Bob Woodward y Robert Costa.
Algunos legisladores republicanos han acusado a Milley de extralimitarse en su autoridad y le han pedido que dimita.