El juez enfatizó que esta no podía ser una sentencia emocional. Los fiscales han pedido 30 años contra el expolicía y la familia de Floyd exige “la pena máxima”.
Este viernes 25 de junio, el expolicía blanco Derek Chauvin, encontrado culpable del asesinato del afroamericano George Floyd, escuchó su condena. El juez Peter Cahill lo sentenció a 22 años de prisión tras las rejas por un crimen que estremeció a Estados Unidos y al mundo.
Los fiscales han pedido una pena de 30 años de prisión contra este hombre de 45 años que, el 25 de mayo de 2020, asfixió en Minneapolis al afroestadounidense bajo su rodilla y desató una movilización antirracista inédita en todo Estados Unidos y también a nivel global.
“Cometió un asesinato brutal”, “traumatizó” a los allegados de su víctima y “generó un shock en la conciencia de la nación”, dijeron los fiscales en documentos transmitidos previo a la audiencia.