El presidente Joe Biden se ha reunido con alcaldes de las principales ciudades estadounidenses con el objetivo de promover su plan para combatir la delincuencia.
Los tiroteos y los asesinatos han repuntado en los últimos meses en todo el país, en medio de un repunte de la violencia armada desde que estalló la pandemia del coronavirus. Al mismo tiempo, ha surgido un movimiento para reformar la conducta policial, especialmente tras la muerte de George Floyd, un afroamericano que murió asfixiado tras ser detenido por la policía en Minneapolis.
Aunque en días recientes Biden ha anunciado varias iniciativas para combatir la violencia, lo cierto es que el gobierno federal tiene pocas herramientas a su disposición para ayudar a los gobiernos locales.
El plan de Bien contempla asistencia económica a municipalidades que necesitan contratar más policías, apoyo comunitario, combate a la violencia armada y medidas para frenar el tráfico ilegal de armas.