El aumento significativo de muertes derivadas del COVID-19 está abrumando las morgues de Georgia y llevándolas a estar cerca de su máxima capacidad.
Un informe reveló que los encargados de los referidos espacios están solicitando intervención estatal para poder palear la crisis actual.
Erin Hackley, forense del condado de Troup, explicó que el año pasado en su jurisdicción se atendieron alrededor de 300 cuerpos, sin embargo, en lo que va del 2021 se han contabilizado más de 350.
Señaló que, debido al incremento acelerado de fallecimientos, se han visto obligados a buscar ubicaciones alternativas para almacenar todos los cadáveres.
La Agencia de Manejo de Emergencias de Georgia (GEMA) reportó que la referida problemática también se ha manifestado en Spalding y Upson.