Este es el segundo intento de destitución del mandatario chileno, que asumió en marzo de 2018 y que tras la crisis social de 2019 no logró recuperarse ante uno de los periodos más difíciles en los 31 años de democracia.
El Senado de Chile rechazó destituir al presidente Sebastián Piñera, cerrando la puerta de un juicio político por eventuales irregularidades en la compraventa de una minera reveladas por los denominados Pandora Papers.
La acusación fue rechazada por al menos 14 senadores, sobre un total de 43. Hubo una abstención y la oposición necesitaba una exigente mayoría de 29 votos favorables para destituir al mandatario, que debe terminar su segundo periodo como gobernante en marzo del próximo año.
La decisión del Senado tuvo lugar cinco días antes de las elecciones presidenciales.
La acusación contra Piñera había sido aprobada la semana pasada en la Cámara de Diputados.