Las autoridades detuvieron a más de 1.000 personas durante esa ola represiva, de las cuales más de 500 siguen encarceladas y otras muchas están bajo arresto domiciliario, indicó HRW.
Human Rights Watch (HRW) acusó este martes al gobierno de Cuba de llevar a cabo, de forma sistemática, arrestos arbitrarios, maltratos contra detenidos y juicios abusivos, en represalia por las protestas pacíficas que surgieron en la isla el 11 julio de 2021.
“Cuando miles de cubanos salieron a las calles en julio, el gobierno respondió desplegando una brutal estrategia de represión destinada a infundir miedo entre la población y reprimir el disenso”, afirmó Juan Pappier, investigador para las Américas de HRW, en el último informe de la organización con sede en Estados Unidos.
“Manifestantes pacíficos y otros críticos han sido sistemáticamente detenidos, incomunicados, sometidos a abusos en condiciones carcelarias nefastas, y juzgados en procesos que son una verdadera farsa”, aseguró Pappier.