El Parlamento de Bolivia abrogó una cuestionada ley que ha articulado por nueve días a comerciantes, transportistas, cívicos y opositores en un paro nacional indefinido que los sectores movilizados afirman se mantendrá hasta que el Ejecutivo del país haga efectiva esa anulación.
Las bancadas en el Senado del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), con mayoría parlamentaria, y las opositoras Comunidad Ciudadana (CC) y Creemos aprobaron la ley abrogatoria por unanimidad por voto nominal, algo que ya se había hecho en la Cámara de Diputados.
El debate en el Senado y en la Cámara de Diputados se enfrascó en la redacción de la “exposición de motivos” de la derogación de la ley que según el oficialismo se debía a que se estaba gestando un nuevo “golpe de Estado” y la “desinformación” que se generó por los alcances de esa norma, mientras que para la oposición daba pie a un “Estado policíaco”.