Según el diario “El País”, Corinna planeó en 2007 que los gestores que administraban un fideicomiso denominado Peregrine entregaran a Juan Carlos I, en caso de que ella muriera, “el 30% de los ingresos provenientes del Fondo de Inversiones Hispano Saudi”.
La examante del rey emérito de España Juan Carlos de Borbón, Corinna Larsen, consideró en el 2007 que se entregara, tras su muerte, parte de la fortuna que mantenía en un fideicomiso al monarca -cuando todavía era jefe del Estado-, según los Pandora Papers.
Pero los abogados de Larsen desvincularon a su cliente de un supuesto entramado financiero para que el rey Juan Carlos I recibiera fondos del Fondo de Inversiones Hispano Saudí en caso de que ella muriera.
“Rumores que carecen de todo fundamento señalan a Juan Carlos como beneficiario de una estructura financiera relacionada con Corinna zu Sayn-Wittgenstein”, señaló Robin Rathmell, del despacho londinense Kobre & Kim en una nota divulgada por la agencia de representación de Corinna.