La gasolina con plomo ya no se utiliza en ninguna parte del mundo, según anunció el lunes el Programa de Naciones Unidas para el Medioambiente (PNUMA), un “hito” que permitirá salvar cada año 1,2 millones de vidas y ahorrar más de 2,4 billones de dólares.
Casi un siglo después de que las autoridades sanitarias comenzaran a alertar sobre los efectos tóxicos de la gasolina con plomo, Argelia, el último país que seguía usando este carburante, agotó sus reservas el pasado mes, declaró el PNUMA.
“El éxito en la campaña de prohibición de la gasolina con plomo es un hito para la salud en el mundo y para el medioambiente”, declaró Inger Andersen, directora ejecutiva del PNUMA, cuya sede se encuentra en Nairobi, capital de Kenia.
Hace apenas 20 años, la gasolina con plomo estaba presente en más de un centenar de países, a pesar de que estudios científicos la identificaron como causa de muertes prematuras, efectos perjudiciales para la salud y la contaminación del aire y los suelos.