El ministro alemán de Exteriores Heiko Maas pidió este jueves “solidaridad con Polonia” en la crisis con Bielorrusia y destacó que el régimen de este último país es el responsable de las “horribles imágenes” que se viven en la frontera.
“El problema no es Polonia,” acotó, denunciando por el contrario que “las autoridades de Minsk traen a los migrantes, utilizan a miles de personas como rehenes en un cínico juego de poder”.
El ministro saliente, que intervino ante el Bundestag en relación con una petición del grupo parlamentario cristianodemócrata para reforzar las sanciones contra el régimen bielorruso, destacó que la primera prioridad es la ayuda humanitaria para las personas atrapadas en la frontera.
“Nuestros valores comunes hay que aplicarlos también en las fronteras exteriores y, tal y como exige el derecho internacional, hay que garantizar el suministro de ayuda humanitaria,” afirmó Maas.